¿Por qué lubricamos? La importancia de la lubricacion.

¿A cuantos de nosotros nos preocupa el buen estado de nuestros autos, camiones o equipos industriales?

Considero que quienes adquirimos cualquier activo móvil o equipos para la industria tenemos en mente el aprovechamiento que podremos lograr, para obtener un retorno optimo de nuestra inversión. Parte importante del cuidado de nuestros equipos radica en la lubricacion de sus partes móviles, de manera que cumplan con sus funciones el mayor tiempo posible, evitando fallas que pudieran desencadenar la perdida de estos bienes.

De hecho, la lubricacion es considerada la piedra angular en sistemas de mantenimiento predictivo, ya que se reconoce que mientras se cuente con lubricantes adecuados y correctos, solo la fatiga por uso podrá conseguir fallas
dentro de los componentes.

¿Pero cuales son los principios básicos o factores que nos ayudan a determinar una correcta lubricacion?
Sin duda deberíamos empezar por seguir la recomendación del fabricante del equipo. Utilizar la información contenida en el manual no es tan complicado, haciendo caso de recomendaciones y especificaciones podremos lograr el correcto aprovechamiento y cuidado de nuestros equipos, el problema empieza cuando decidimos ignorarlo.

Una problemática sería no contar con ese manual, si esto fuera así ¿Qué acción podríamos realizar para solucionar este tema? Una opción seria contactar al fabricante y solicitar orientación al respecto, sin embargo, si esto no fuera posible, debemos considerar la toma de muestra del aceite con el que ha trabajado el equipo para realizar un análisis de laboratorio que nos de la certeza de cual es lubricante adecuado, esto acompañado de la información de operación y condiciones a las cuales se ve sometido el lubricante.

Condiciones óptimas de un lubricante.

Cuando sabemos cual es el lubricante adecuado, cuando aplicamos el lubricante correcto, ¿Cómo determinamos que nuestro lubricante se encuentra en un estado optimo?
La regla general es muy simple al interior de nuestros equipos debe haber un lubricante limpio, fresco y seco.
Limpio al contar con un buen sistema de filtración, adecuado a las necesidades del equipo, capaz de mantener la presencia de partículas en la menor cantidad posible y, sobre todo, tener depósitos herméticos que impidan la entrada de agentes contaminantes.

Fresco, se refiere a que se encuentre en buenas condiciones químicas, que podamos controlar los aspectos que contribuyan a la oxidación de este y que en aquellos equipos que podamos tener un tiempo determinado de cambio, este sea realizado cuando se haya cumplido su utilidad sin excedernos en su utilización.

Seco, evitando la entrada de contaminantes líquidos ya sea agua, anticongelante, combustible o cualquier otro producto químico que pueda alterar su composición o que contribuya a la oxidación de este.

Por ultimo y no menos importante, tengamos en mente que la utilización de productos que no cuenten con información suficiente por parte de su fabricante, nos puede representar una amenaza para el cuidado de nuestros equipos, seamos responsables de su cuidado considerando el esfuerzo que representa contar con ellos y sobre todo la utilidad que representan para nuestras actividades.